El aceite de coco, una grasa vegetal extraída de la pulpa del coco maduro, es un pilar ancestral en el cuidado capilar, venerado por sus extraordinarias propiedades. A diferencia de otros aceites, su composición única, rica en ácido láurico, le permite penetrar profundamente la fibra capilar, reduciendo significativamente la pérdida de proteínas que causa el daño y la rotura.

El aceite de jojoba, una cera líquida dorada extraída de las semillas del arbusto Simmondsia chinensis, es un ingrediente revolucionario en el cuidado capilar. A diferencia de otros aceites, su composición es casi idéntica al sebo natural de nuestro cuero cabelludo, lo que lo convierte en un aliado excepcional para equilibrar, hidratar y nutrir el cabello desde la raíz hasta las puntas